Supervivientes del comunismo, flautistas y cantantes de folk, fugitivos del capitalismo, libreros, artesanos, herreros o vendedores de chatarra pasan desapercibidos en el tránsito diario de las calles de la capital búlgara. Dieciséis historias de hombres y mujeres, trabajadores a pie de calle, desvelan la historia de una transición política ineficiente.
Y es que si las recientes protestas en Sofía han levantado viejas y nuevas demandas sociales, si la esperanza de cambio político ha agitado las calles durante casi un año, la realidad aún se tiñe de exclusión, decepción y huída. El problema es estructural; las mismas caras, los mismos procedimientos y aún menos transparencia política. Sin embargo, la vida continúa y también lo hace a pie de calle.
Sin horarios fijos para algunos, sin jefes para otros, con formación universitaria o no, estos trabajadores saben qué es lo que necesita el viandante; el oficinista que vuelve de trabajar, el manifestante hambriento o el estudiante en época de exámenes. Les agrada lo que hacen y lo hacen con principios. Y, junto a ello, viven del gesto eufórico del aquel que escucha la canción que necesitaba escuchar, de la decisión esporádica de comprar un libro o unos pendientes, de aquel que se sintió atraído por el color de las bayas de otoño o de aquel que quiso protestar abanderado frente al Parlamento Nacional. Traen color a las calles.
Y todas esas historias se encuentran en el emblemático mercado de frutas de la calle Graf Ignatiev, entre los libros de segunda mano de la Plaza Slaveykov, entre los aromas y los colores del Mercado de las Mujeres y el Mercado de Krasno Selo y entre la gente, en las bocas del metro, en las paradas del tranvía. Donde la ciudad respira.
- Sofia XXI: Post communist urban portraits
Estas fotografías fueron publicadas en el semanal búlgaro TEMA Número 641 24-30 de marzo 2014 junto al trabajo escrito de Lilia Kostova, periodista y traductora.